La Furia de los Mutantes: Capítulo 14 - El combate decisivo

Nuevo capítulo de la historia...

LA FURIA DE LOS MUTANTES

CAPÍTULO 14

EL COMBATE DECISIVO

Desmond Geiserfield

Alan me lanza un golpe al rostro y lo detengo fácilmente, respondo con un codazo en su rostro y doy una patada en su pecho, lo que hace que caiga al suelo.

- Estás en desventaja si quieres atacarme directamente.

- Eso es lo que crees, Desmond.

- Debes tener algo más, se supone que serías nuestro líder, pero ya fallaste en la confianza. Veamos que tal lo haces en combate.

- Puedo derrotarte sin problemas.

- August no pensaría lo mismo si siguiera vivo.

El grito de furia de Alan me ayuda a predecir y detener el golpe con el que decide atacarme. Entonces le regreso el golpe en el rostro, lo esquiva y me golpea en el costado, sin tener efecto alguno. Alan retrocede para esquivar un golpe y lanza una llamarada que esquivo con facilidad.

- Esto empieza a ponerse bueno... usaré mis poderes también.

- Tus poderes no se comparan a los míos, Desmond.

- Ya veremos si te sirven contra mí.

Alan prende fuego a sus brazos e insiste con el ataque cuerpo a cuerpo. Detengo su golpe con mi brazo izquierdo y golpeo su estómago con el derecho, esquiva un golpe al rostro y asesta con un revés en mi quijada, el casco de mi armadura se debilita y en respuesta asesto un golpe en su costado y él responde con varios golpes, de los cuales desvío seis, termina su combinación con una patada de talón imbuida en fuego y al asestar destruye mi casco.

- ¡Ja! Si se supone que no puedes morir ¿para qué usar una armadura?

- Me gustaría proteger mi ropa del desgaste en combate.

- Claro. - dice Alan de forma burlesca - ¡No te creo nada, Desmond!

- Entonces, basta de palabras.

Corro hacia él, dispuesto a atacar, ataco su rostro y el esquiva de un lado a otro, regresa algunos golpes y el fuego en sus brazos debilitan mi armadura al detener sus ataques. Tras algunos intercambios, asesto con un codazo en su quijada, golpeo su abdomen con un gancho y cuando se inclina por el golpe, asesto un puñetazo ascendente en su quijada y cae a una distancia considerable.

- Tuviste suerte, infeliz. - murmura mientras se incorpora - ¡Esto ni siquiera ha empezado, Desmond!

Alan aprieta los puños y sus brazos quedan cubiertos con una especie de roca volcánica. Corre hacia mí y yo corro hacia él. Ataca con su brazo derecho y yo hago lo mismo para chocar los puños, como era de esperar mi golpe es tan fuerte que lanza a Alan varios metros atrás, pero su ataque no fue en vano, la armadura que cubría mi brazo fue destruida en el impacto. Alan se levanta y se envuelve totalmente en fuego, empieza a levitar y vuela hacia mí. En la embestida golpea mi estómago con su hombro y me lleva de encuentro, empieza a elevarse hasta que vuela directamente hacia arriba.

Estamos en el cielo, a una enorme distancia del suelo y Alan sigue volando más y más alto, golpeo su cabeza dos veces con mi codo derecho y Alan frena dejándome en el aire mientras envuelve sus brazos en roca volcánica de nuevo y golpea mi abdomen con el codo derecho, vuela para quedar detrás de mí y con un codazo de revés me golpea y caigo a gran velocidad con la espalda apuntando hacia el lejano suelo. Entonces Alan vuela hacia mí y acelera mi caída golpeándome una y otra vez el estómago y el pecho, cada golpe acelera más mi caída, después de nueve golpes, Alan me embiste de nuevo con el hombro y caemos a toda velocidad, entonces, Alan frena y yo caigo al suelo de espaldas, la arena se eleva alrededor del área en la que caí. Tras varios segundos, me incorporo poco a poco y Alan está de pie a lo lejos.

- ¿Quién lo diría? - murmuro al ponerme de pie mientras la arena que me ocultaba se dispersa - Te subestimé, Alan. - le digo observando los escombros de mi armadura superior en el suelo - No creí que serías capaz de atravesar mi armadura. - río un poco - Y mira, destruiste más de la mitad de ella.

- Tengo mucho más en mi arsenal, Desmond. ¡El combate ya empezó, deja de hacer el imbécil!

- Basta ya de palabras, esto se pone serio.

Alan vuelve a encenderse en fuego y vuela hacia mí, yo me agacho y con ambas manos lanzo tierra hacia él mientras se acerca, no contrarresto el fuego por completo, pero sirve de distracción. Toma distancia y vuelve a volar hacia mí, golpea mi rostro y toma distancia de nuevo y repite el proceso, golpeando mi estómago y mi rostro. Sus golpes al estómago me sacan el aire y me debilitan, vuela de nuevo hacia mí, pero esta vez yo golpeo su rostro y Alan cae en la dirección en la cual volaba y golpea el suelo repetidamente. Aprovecho el tiempo que le toma incorporarse para tomar aire... se ha vuelto más fuerte de lo que esperaba.

- ¡Desmond! - grita Alan a lo lejos - ¡No he demostrado todo mi poder, y creo que serás tú quien lo conozca primero!

- ¿Y qué lograrás con eso?

- ¡Sólo demostrar mi superioridad!

Alan se envuelve en llamas una vez más y tras esto su cuerpo queda envuelto en una armadura de roca volcánica, no me dejará golpearlo. Camina lentamente hacia mí y yo camino para encararlo. Estamos frente a frente, nos miramos con rencor, primero destruye mi armadura superior y ahora él tiene una armadura que dudo poder destruir... pero lo intentaré. Este combate será realmente complicado, pero no pienso perder contra él.

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Alan Razor

- No puedes morir ¿cierto? - pregunto a Desmond.

- Si pudiera morir, no estaría pateando tu trasero ahora mismo.

- ¿Pateándome el trasero? - digo antes de soltar una carcajada que no puedo contener - Espero que no me estés mintiendo, Geiserfield. Porque así puedo romperte la cara sin parar y sin sentir remordimiento.

- En tus sueños, imbécil.

Desmond dirige un golpe hacia mi costado izquierdo y el efecto es mínimo, golpea el costado derecho y repite la combinación con el mismo resultado, sus golpes no me afectarán ahora. Le regreso el golpe en el rostro, luego doy otro golpe a su estómago y de nuevo al rostro, entonces cae al suelo, lejos de mí. Tras esto, salto hacia él y asesto un codazo en su estómago. Lo veo en el suelo y sólo puedo burlarme de él.

- Y tan confiado que estabas. - Desmond no se mueve, sin decir ni una palabra - ¿Y pensabas que ibas a ganarme? - me acerco a él lentamente y me encuentro de pie frente a su costado izquierdo - ¡Respóndeme cuando te hago una pregunta!

Pongo mi pie bruscamente sobre su pecho y empiezo a pisotearlo, una y otra vez. Sólo lo escucho quejarse y no puede levantarse, está débil y agotado.

- Eres un asesino, Geiserfield. - le digo mientras pateo sus costillas.

- Crees que eres inocente... pero no eres más que un sucio traidor. - responde Desmond con voz agotada - ¡Y eso es mucho peor que un asesino!

- ¡Cállate! - vuelvo a pisotear su pecho con más fuerza esta vez, Desmond se niega a gritar haciéndose el fuerte.

- Soporté peores torturas mientras me ignorabas. - comenta tratando de alejar mi pie con sus manos.

- ¡No se compara con lo que sufrirás ahora! - Pisoteo dos veces más su pecho y pateo sus costillas tan fuerte que lo alejo de mi - ¡Levántate, Desmond! - le grito burlescamente - ¿No se supone que eres más fuerte que yo?

- Antes de tu entrenamiento, lo era... Ahora creo que eres un poco más fuerte que antes.

- No sabes aceptar una paliza, ¿verdad? ¡Estás acabado! ¿Piensas que puedes engañarlos? ¿Piensas que vas a sorprenderlos? ¡Inútil!

- Sabes... - dice Desmond mientras se incorpora lentamente - No eres el único que entrenó, puede que pasara un año preso, pero eso fue para mí un entrenamiento. Un entrenamiento que indica que hasta ahora, tus ataques no me afectan como tú crees.

Desmond corre hacia mí, como si no hubiese sido lastimado, como si se estuviese burlando de mí. Golpea con rapidez la armadura, de un lado a otro, intento atacar, pero la armadura me hace lento y esquiva con facilidad mis ataques. Retrocedo esperando tomar distancia, pero él se mueve más rápido y continúa golpeando.

- Tan solo imagina, Alan. - me dice mientras sigue golpeándome - Ya era fuerte antes y ahora tuve seis meses para entrenar. ¡Y vaya que me han servido!

- ¡No muestras mucho desempeño, imbécil! - le digo mientras intento asestar algún golpe.

- ¿Eso crees? ¡Entonces, voy en serio!

Sigue golpeando y empiezo a notar que aumenta la velocidad de sus ataques, y entre más rápido golpea, más me hace retroceder. Llega un punto en que sus golpes empiezan a provocar grietas en mi armadura y continúa golpeando y gritando de furia, no logro asestar ningún ataque contra él, esquiva y continúa golpeando. Entonces poco a poco mi armadura queda reducida a escombros. ¡Cuánto poder!

Me da un golpe ascendente en el estómago que me hace elevarme un momento y remata con un golpe en mi estómago para lanzarme lejos. Estoy en el suelo, sin poder moverme, mirando al cielo, entonces Desmond corre rápidamente y salta sobre mí. Me golpea en el rostro cinco, seis, siete veces y empieza a subir la velocidad, si no actúo rápido me hará lo mismo que le hizo a la armadura. Ocho, nueve, diez golpes... Está golpeándome con más fuerza cada vez y entonces...

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Henry Mattews

Nunca había visto a Desmond teniendo tantas dificultades en combate, siempre hacía pedazos a sus oponentes sin problema. Por otra parte, no había visto a Alan luchando con tanta variedad de ataques. Hacer a Desmond tener dificultades no lo logra cualquiera, demuestra que está a su nivel... ¿pero quién podrá ganar?

Todos estamos atentos al combate en todo momento, el sol se esconde poco a poco y el combate se ha vuelto largo, me sorprende la determinación que tienen.

- ¿Qué se supone que debemos hacer, Matt? - me pregunta Jane preocupada.

- La verdad... pienso que lo mejor es que se arreglen entre ellos.

- ¿Y qué conseguirá el ganador? - pregunta Claire - Esto podría separar el grupo por completo.

- Tranquila, Claire. - le respondo - Suceda lo que suceda... trataré de que el grupo siga unido... con o sin ellos.

- ¿Te parece prudente? - me pregunta Arthur.

- No realmente... Desmond ha salvado las situaciones en las que nosotros hemos caído y ahora Alan se ha vuelto tan poderoso como él. No querría a ninguno de ellos como enemigo... pero si no pueden trabajar juntos después de esto... no creo poder tomar la decisión.

- ¿De qué decisión hablas? - pregunta Chase confundido.

- Al terminar el combate, sólo uno ganará... quizás el orgullo del perdedor no le permita trabajar con el ganador. Y querrá que su rival se vaya. ¿A quién apoyar entonces?

- Alan es un traidor, Matt. - dice Claire fríamente.

- ¿Claire? - pregunto sorprendido al escucharla.

- ¡Sabes que es cierto! Tú mismo dijiste que el dispositivo no fallaba, que funcionaban por igual. En Ánester, Alan me dijo que de todo el grupo, yo era quien más deseaba que sobreviviera. Eso no se puede malinterpretar... si hubiese tenido la opción de salvarme la vida a cambio de la vida de ustedes... quizá lo habría hecho. Tenía mis dudas, pero tras lo sucedido con Desmond... no me queda ninguna duda.

- Claire... tú no dirías cosas así. - le dice Jane preocupada.

- ¿¡Tienes idea de cómo me siento!? - pregunta Claire con tristeza y furia a la vez - Saber que Desmond fue ignorado durante un año y que mi señal fue respondida en seguida. Si las cosas hubiesen sido diferentes... Desmond no estaría aquí... esa fue la principal intención de Alan.

Tras oír esas palabras, todo empieza a conectar en mi mente, Alan siempre estuvo en contra de los métodos de Desmond, desde el inicio. Las discusiones que tenían sobre matar en defensa propia se volvían cada vez más fuertes, la verdad es que temía que este combate sucediera a causa de ellas. El combate continúa y vemos a Desmond golpeando la armadura de Alan a enorme velocidad, la destruye en cuestión de segundos y con un par de golpes más, Alan se encuentra en el suelo, mirando al cielo. Desmond corre y salta para quedar encima de él y continúa golpeándolo con gran velocidad, con tanta fuerza. Cuando el combate parece estar por terminar, Alan grita de furia antes de recibir otro golpe y crea una enorme explosión que por poco llega a nosotros.

Una enorme muralla de metal nos protege, después se transforma y tenemos a Kurt frente a nosotros, nos salvó de la explosión. El suelo es una plataforma metálica creada por Kurt ya que la tierra alrededor ya no estaba. Volteo para ver que todo esté bien, Claire y Noa se pusieron juntas a cubierto, Jane abraza mi brazo con fuerza, Chase y Arthur saltaron pecho tierra en direcciones opuestas. Vemos una enorme niebla ocasionada por la explosión y la arena del desierto. Estamos de pie al borde de un cráter, resultado de la enorme explosión. En él, se logra ver una silueta levantándose, parece ser Alan, esa explosión pudo habernos matado... ¿Tan cegado está por su odio?

Del otro lado se ve la silueta de Desmond, incorporándose con gran dificultad. Se mantienen en su posición, no se mueven hasta que la niebla se dispersa. Vemos a un Alan con su rostro sangrando a causa de los ataques de Desmond y agotado tras usar una enorme cantidad de energía en esa explosión. Y del otro lado vemos a Desmond, su playera fue completamente destruida en la explosión, muy apenas se salvó un colgante que llevaba puesto bajo la playera, su cuerpo tiene un montón de cicatrices, enormes y desagradables. Me quedo boquiabierto al verlo, volteo para ver si los demás estaban mirando lo mismo, pero la verdad es que no podían mirar nada más.

- ¡Mira esto, Alan! Has dejado al descubierto gran parte de mis cicatrices. Cicatrices que quería ocultar. No te imaginas el dolor que me ocasionaron día tras día.

- ¡Se suponía que debías morir!

- ¡Se suponía que querías ser un héroe! Y mira en lo que te convertiste. Un héroe que deja morir a quien pide ayuda... no es un héroe.

- ¡No sabes nada sobre ser un héroe!

- No, Alan. ¿Pero tú lo sabes?

- Sé más que tú sobre ser un héroe.

- Te equivocas. - dice Desmond mientras observa el colgante - Yo fui el héroe de una mujer... y de una niña, tiempo atrás. - tras decir eso, empieza a caminar en dirección a nosotros.

- ¿A dónde crees que vas? - grita Alan furioso.

- En un segundo vuelvo para patearte el trasero. - salta para salir de ese enorme cráter se acerca a nosotros y me mira.

- Este colgante, es el único recuerdo que me queda de mi familia, antes de la explosión de Lastaror. Mantenlo a salvo en lo que termino el combate.

- De acuerdo. - le digo mientras tomo el colgante y Desmond regresa a donde se encuentra Alan.

Miro el colgante, tiene un botón para abrirse y dentro veo una foto de Desmond, antes de la explosión... con su hija y su mujer. En el espacio de la izquierda se ve una pequeña nota escrita probablemente por la niña: "El héroe de la familia". Me rompe el corazón imaginar la reacción de Desmond al enterarse de esto... incluso justo después de asesinar en combate a quien fuera su mujer sin él saberlo. Es asombroso como encuentra en este colgante fuerzas para seguir. Si estuviera en su lugar, al ver un recuerdo así... me deprimiría.

- ¡Espero que hayas acabado con tus trucos, Alan! - le grita Desmond

- No he terminado todavía, Geiserfield.

- Entonces, acabemos con esto de una vez.

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